junta de chiflados.

nunca pude hacer amistad con mis compañeros directos de oficina. mis amigos favoritos son, sin lugar a dudas, bastante peculiares. lalo, eduardo, por ejemplo, el jardinero, sufre ataques de ansiedad, no puede respirar y dice que ve luces blancas y azules, explotando en frente de él. a veces comienza a llorar y se tira al suelo entre el pasto, dándole golpes a la tierra. luego de un rato, cuando la enfermera (otra chiflada) y yo vamos, se le pasa el berrinche y se levanta con una sonrisa de oreja a oreja y se pone a cortar flores, a regar los campos y limpiar las banqueras. es una disputa y una aventura hablar con él. 

david, uno de los supervisor o jefes, va seguido al psiquiatra (igual que lalo, eduardo), es hiperactivo y neurótico obsesivo. toma pastillas, mucho café (aunque el doctor se lo prohibió) piensa que si pisa las rayas del piso, algo podría pasarle a él, o a sus operarios. a veces intenta golpear a los otros ingenieros. ellos ya lo conocen. una vez a mi, me aventó unos papeles en la cara muy enojado. luego, riéndose me dijo que tenía que hacerlo y acabó llorado. siente que tiene que hacer cosas o las paredes lo aplastarán, el techo se caerá o el sol nos derretirá a todos como barras de mantequilla. 

isaura, de intendencia, es la señora que hace la limpieza cree que en la brujería, la muerte y la magia (según ella, la magia negra no, yo sigo teniendo mis dudas). cuando limpia los escritorios y no hay nadie porque todos se han ido a comer sus alimentos, yo me he quedado a espiar debajo de uno de los escritorios, con la luz apagada. anda de un lado a otro fingiendo que limpia, pero en realidad hace unos paces con un manojo de hierba que guarda en su delantal, hecha unos polvos de algo raro y dice unas palabras muy chistosas. me cae bastante bien. tiene cara como de un gato. 

la enfermera (la chiflada que ayuda al jardinero) a veces se ríe extremadamente fuerte. sus risas se oyen por toda la fábrica. nunca come nada y sólo toma café y fuma cigarros. tiene piercings en todos lados y jura que viene de una familia de millonarios, que son creyentes del diablo, y esas cosas. el otro día nos contó que ve mounstros en su casa y que la despierta y no la dejan dormir. platicamos bastante y nos burlamos de los demás casi todo el día. 

aún así, esta tripleta de lunáticos, que de un momento a otro se volvió cuarteta y luego quintenta, son todos mis amigos. no se porqué pero me siento completamente relajado junto a ellos. como si estuviera en mi casa.