Justamente ya, señor pianista

Arrepentirse es mirar en círculos hacia atrás. Uno -esa exaltación severa, esa guerra de letras de antemano pérdida, las infulas, el trueno- nunca sabe bien de cierto lo que la vida es. Si hiciera una descripción aquí mismo, sería descubierto el el instante. Barcos piratas, que viajan al oeste. Al norte. Al sur. Perdonar es arrepentirse pero dejando ir. Quisiera -extraño- el color volcánico de las mañanas.