Tengo un latido idiota en el pecho. Un coágulo enamorado. Algo así como un paso lento y rápido. Estoy caminando por las calles de tu cuadra. Aquellas donde veía amanecer y no amanecer. Y aquellas donde sigues. Y voy caminado y me encuentro frente a tu puerta, con las piernas echas un chicle. Y el corazón bom bom. Y tu ventana ahí, y toda tu ahí.