Quiero rayarte el sonido. Hacerte en pentágono de besos. Dejar algunos pennies sobre la foto. Letreando las fotografías. Quiero rayonearte la voz entera. Hacer vintage por todo el cuerpo. Dividirte en cinco y meterte en cinco recuadros diferentes: ajenos cada uno de ellos. Quiero letrearte la boca, el cabello. Llenarte de letras los ojos y la cabeza.
prólogo o epílogo
el lector se encontrará en este blog toda una serie de fallas estructurales y gramaticales; de forma y contenido, de orden y cronología. el autor, en un intento muy frustrado de hacerse pasar por novedoso o chiflado, se ha visto acosado constantemente por seres imaginarios que se colgaron alevosamente entre cada una de sus neuronas, como jumanjis en plena selva, como fukús de barcos que llegaran naúfragos en tazas gigantescas de café.