19.9.10


Se convirtió en un vicio secreto (verde y de alabastro; de pantano y relámpago) Una vergüenza ofensivamente pasmosa y alevosa. Pero, tenía que hacerlo; eso y además de que su signo zodiacal lo apuntalaban en la categoría de necio irremediable y perseguidor inequívoco. Porque escribir -recordó (inventó)- era simplemente perfecto: hilar ideas, entretejiendo tiempos, personajes y escenarios. Era una acción...pero también, consecuencia en sí misma; como un acto circular que nunca empezara o terminara propiamente dicha, sino una seria fantasías y reproches que acabaran por salir inexpugables hacia la superficie de la tierra, como un volcán endemoniado: mezcla realidad y mitad ficción; libertad y exclavitud.

prólogo o epílogo

el lector se encontrará en este blog toda una serie de fallas estructurales y gramaticales; de forma y contenido, de orden y cronología. el autor, en un intento muy frustrado de hacerse pasar por novedoso o chiflado, se ha visto acosado constantemente por seres imaginarios que se colgaron alevosamente entre cada una de sus neuronas, como jumanjis en plena selva, como fukús de barcos que llegaran naúfragos en tazas gigantescas de café.