abrir las ventanas, limpiar el piso, ver el cielo, fulminante y en forma de música (como el párpado gigantesco de dios), creer que todo irá bien en el día: sentirse nuevo, muy contento, y con algo de miedo; cantar dos canciones incompletas, y un verso de memoria; recordar cuatro libros que se han dejado; las horas pendientes de en la mañana; olvidar la anorexia/paranoia y creer, que todo irá, sencillamente bien.
prólogo o epílogo
el lector se encontrará en este blog toda una serie de fallas estructurales y gramaticales; de forma y contenido, de orden y cronología. el autor, en un intento muy frustrado de hacerse pasar por novedoso o chiflado, se ha visto acosado constantemente por seres imaginarios que se colgaron alevosamente entre cada una de sus neuronas, como jumanjis en plena selva, como fukús de barcos que llegaran naúfragos en tazas gigantescas de café.
