blog de relatos de hombres imaginarios con jumanjis, auras matutinas, sueños mal recordados y maromas neuronales.
Estamos tragando artea velocidades de jeringa. Queremos respirarnos el plástico sin ahogarnos. Amar es precisamente eso: infectar a los demás de nosotros mismo. Envenenarnos. Infectarnos de feromonas.