Encontraron el cuerpo a mitad de los pasillos que se extendían cómo arterias y venas, entre el paisaje selvático verdoso y el azul celeste del mar. Había burbujas grandes como pelotas que respiraban dentro del cuerpo que empezaba podrirse y animales e insectos que empezaban a devorarlo. Franshesco Rossi había llamado a las autoridades locales desde su Samsung s20, marcando el 911 justo como había...
13.9.24
12.9.24
Una de flashazos y maromas
Hay carnavales mentales que se vienen de forma intempestiva y nadie los invita nunca a la fiesta, precisamente y de sobra son esos los mejores. No siempre el planear mucho las cosas resulta en la combinación ganadora. Y es que estás tormentas nocturnas llevan siempre la ventaja, porque no sabe uno a dónde van a parar ni el rumbo que la adrenalina del momento les funciona de motor. Así sucede que cuando...
4.9.24
intermitencias de verano
Lejos de alcanzar algún frenesí catalogable de paroxismo, es verdad que los días se van sucediendo unos a los otros, irremediablemente. Las frases quedan incompletas. Mi mente se ocupa de darle más cabida a la intermitencia constante del poco desenfreno. Intento hacer las cosas distintas ésta vez. La lluvia cae a goterones, es la lluvia de Septiembre. Yo no quiero-tengo todas las respuestas, pero...
31.8.24
jinetes de compatibilidad y errores de sombrero
No importa lo que vaya sucediendo o lo que esté pasando, uno tiene que seguir escribiendo. A veces estas trampas pasan. Se atraviesan como leones en forma de lagartos, zigzagueando en el piso como cocodrilos verdosos que esmerilean en tornasoles de multiples colores. Uno quiere, sencillamente, el momento de paz. La casa del lago. La película azulosa y negra del detective. Hoy le declaro la guerra...
16.5.24
un bombazo del laboratorio
una parte de mí, de nosotros, se rompió irremediablemente. he vivivo, y ahora puedo decirlo en voz alta, el dolor de una manera que nunca imaginé. aún con todo, y sobre todo, el navegar por el día y el río misterioso que lo espera a uno en cada esquina, hace que tenga uno que plantarse como gigante a medio precipicio. estoy, completamente atravezado por mi destino. uno pudiera pensarse tristeza,...
23.1.24
alumbrando los pájaros del anonimato
nunca quise dedicarme a esto. ni si quiera, por el más leve intersticio de mi infancia, cruzó al idea de trabajar en lo que hago. quisiera pensar que fue uno de esos golpes fortuitos del futuro (ese toro mecánico que nos zarandea a diestra y siniestra y que, lejos de tener cualquier sentimentalismoa, se empeña en tirarnos lo más lejos y maltratados posibles de su espalda). cuando era niño, en...
18.1.24
una de la alfombra que volví a pisar
estamos irremediablemente ligados a pisar las mismas pisadas de años anteriores que se revuelven con los venideros y probablemente nunca entenderemos. por ejemplo, aquí, de las miles de posibilidades que el destino -ese duende mala entraña, que se esfuerza por torcer las voluntades y por engañar a las deidades de los burdeles y los olimpos- nos tiene destinado, me encuentro pisando la misma alfombra...
31.12.23
Una visita inesperada
Boby se presentó en la mañana siguiente con la cabeza llena de bruma y la repetición incesante de las lineas de la carretera. Se le marcaban una tras otra, amarillas y blancas, esperandolo como cocodrilos gigantescos debajo de un pantano. Saludo a todos como si nada hubiera pasado y se ajustó la corbata, calándose un poco el saco del traje. Estaba en su mejor momento. Nada podía detenerlo. Tenía...
27.12.23
Las Horas
Judith miró las hormigas sobre el mantel. Una película esmerilada de bruma enfila por el horizonte descampado, entre un cielo oropel y cuarzo, hecho de piedras preciosas. OILMASTER, se lee en la tapa frontal del tostador. El olor a shampo de mango recorre toda la cocina, sobreponiéndose al de la comida. Y eran las horas. Las Horas, después de todo. Raúl estaría a mitad de campo,...
7.5.21
la dedicatoria más bonita del mundo
tenía tanto por decirte que no sabía ni siquiera por dónde empezar. tanto por contarte, por discúlparme, por hablar. porque creo que en las segundas oportunidades mi amor, y porque creo que podemos ser felices todavía. tenía miedo y durante mucho tiempo lo tuve sin darme cuenta, de amar, de volver a ser feliz, de reírnos juntos. ésta dedicatoria -atrasada y diferida y con ínfulas de poemario- es por...
2.5.21
tu eres quien inunda el laberinto de mi cabeza en las mañanas. la.silueta de tu cuerpo en la oscuridad cuando me hablabas. todo eso se ha ido ya. lo perdí. y perdí todo como se pierden las cosas más simples y tontas y las más hermosas e importantes. tu eres quien ronda todas las horas de mi día.&nb...
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prólogo o epílogo
el lector se encontrará en este blog toda una serie de fallas estructurales y gramaticales; de forma y contenido, de orden y cronología. el autor, en un intento muy frustrado de hacerse pasar por novedoso o chiflado, se ha visto acosado constantemente por seres imaginarios que se colgaron alevosamente entre cada una de sus neuronas, como jumanjis en plena selva, como fukús de barcos que llegaran naúfragos en tazas gigantescas de café.